En un evento reciente en la Ciudad de Puebla, Alfonso Ramírez Cuéllar, representante de Claudia Sheinbaum en asuntos laborales, hizo eco de un movimiento creciente entre trabajadores de diversos sectores que exigen condiciones laborales más justas y un desarrollo equitativo. Este grupo incluye a maestros, telefonistas, petroleros, médicos y enfermeras, quienes se han sumado a la llamada transformación impulsada por la 4T, enfocándose en salarios justos y pensiones dignas.
Ramírez Cuéllar destacó los esfuerzos realizados desde la llegada del gobierno actual para mejorar las condiciones de trabajo y alentar a los inversionistas a adherirse a criterios de justicia salarial y respeto a las organizaciones sindicales. Señaló que Puebla se ha convertido en una prioridad en la agenda del gobierno, con planes para impulsar significativamente la industria y el bienestar general, subrayando compromisos con el desarrollo económico y la protección de la vida laboral.
Por su parte, Alejandro Armenta, candidato a la gubernatura por la Megacoalición “Sigamos Haciendo Historia”, enfatizó la necesidad de un proceso electoral tranquilo y pacífico para asegurar el avance y la estabilidad del país. Resaltó la legitimidad de la 4T como un movimiento justo que busca separar el poder económico del poder político, beneficiando directamente a los trabajadores de México y de Puebla.
Armenta también hizo un llamado a discutir y convencer, buscando la unidad en la acción para lograr la separación del poder económico extranjero y la defensa de los recursos nacionales como el petróleo y el litio. El evento contó con la participación de figuras notables como Erik Paleta y Fernando Mendoza Arce, representantes de los gremios de telefonistas y trabajadores de la salud, respectivamente.
Este enfoque en la dignidad laboral y la justicia económica promete transformar Puebla en un modelo de desarrollo sostenible y equitativo para el resto del país.
